miércoles, 9 de abril de 2014

Un acueducto casero

Cerca del pueblo de Jambaló está Loma Larga. Se llama así porque (como dijo una señora) todas las veredas tienen nombre y porque es una loma alargada entre San Antonio y Nueva Jerusalén. Es una zona con déficit de agua. Para ver brotar una gota se requiere de una larga paciencia. Silvio sembró y esperó cinco años y vean lo que cosechó. Y oigan.

Un acueducto casero























Después de quedar con maripositas en el estómago al ver la hiladora y su historia de amor, nos fuimos para Loma Larga, en el municipio de Jámbalo, donde encontramos  la parcela del Silvio Campo ubicada en lo alto de la vereda. Al caminar hacia este lugar observamos que a su alrededor hay biodiversidad y un hermoso paisaje que la Madre Tierra nos regala para admirar. Al llegar, los integrantes del equipo de la Campaña nos presentamos y la familia nos dio la bienvenida con un  café cultivado orgánicamente y un bizcochuelo hecho en casa en un horno de barro. Ellos no son dependientes de lo exterior para la marcha del hogar.


Horno de barro tradicional.














Silvio nos cuenta todo el proceso que ha tenido que vivir durante años porque en este lugar es difícil el abastecimiento del agua ya que no hay un acueducto en la vereda. Además, sobreviviendo en medio de la guerra porque su casa está en un alto. Sin embargo él dice que vivir y compartir con su familia y con la comunidad los ha llevado a estar más unidos y que tienen más respeto y amor hacia la Madre Tierra.


La casa de Silvio está ubicada en lo alto de la vereda.















Por la gran necesidad de agua que tienen en la vereda él tuvo la idea de inventar algo para solucionar este problema y desde ahí comienza a sembrar toda variedad de vegetación de reforestación y que le dé mucha humedad al lugar para así obtener agua en abundancia y crear su acueducto casero. Para lograrlo tuvo que esperar entre cuatro y cinco años para ver el resultado. Cuando comenzamos a subir para conocer el acueducto casero, encontramos en el recorrido los cultivos de arveja, maíz, café, granadillas comunes, nacedero, platanillo, entre otras variedades. 


Variedad de heliconia sembrada al rededor del ojo de agua.
En el sito reforestado la humead es permanente.



















Al llegar al ojo del agua se observa que ha tenido mucha dedicación en sembrar y conservar ese lugar, comenzando con la consulta del The Wala: el mayor le hace la armonización y cada tres meses vuelve a hacer el trabajo; esto le ayudado a que el  acueducto este  siempre  en abundancia, que aun en sequias el agua abastece su hogar. También hizo una desinfección cuando hubo combates alrededor porque quedaron casquillos de fusiles y otros residuos que deja la guerra.


Filtro y tanque.















Hay dos suministros de agua. Uno es para su casa, el cual es hecho solo con 10 metros de manguera, un tarro plástico de 20 litros, una botella reciclada y una malla. El procedimiento que él hace es un camino para que el agua llegue donde está situado un pequeño pozo y de ahí pase al tarro plástico por la manguera; de ahí pasa por un filtro en el cual está una malla y un envase plástico, separando la suciedad o residuos grandes. Este proceso es el que abastece la casa para su uso potable ya que esta agua sale pura porque no tiene ningún contaminante alrededor y también es de uso doméstico. El otro suministro es más grande pero Silvio lo utiliza para riego de sus cultivos porque este no tiene filtro y lleva muchos residuos, y aún más cuando llueve.






















Esta familia es muy  trabajadora. La  esposa de Silvio hace mochilas de lana de ovejo y  sus hijos  también trabajan como agricultores. Ellos como nasas tienen su huerta tul que les permite su propia autonomía alimentaria y dicen que no les hace falta nada en su hogar porque en alimentación ellos mismos se abastecen y trabajan  su propia parcela. El único sueño que a ellos les falta realizar como familia es que su invento tenga más recursos económicos para que el acueducto sea utilizado en el bienestar de la vereda y así  suministrarle a la comunidad el agua que tanto necesitan.



Artesanías elaboradas por la compañera de Silvio.




















Silvio Campo está dispuesto a compartir su experiencia de vida con los demás para que ésta sea aprovechada en la educación propia y así  crear conciencia de lo importante que es agua y que todos la podemos cultivar, conservar, respetar, tratarla como un ser vivo que es y no como un recurso al servicio de planes que la ‘ferean’ o la privatizan.





Panorámica de Jambaló, resguardo con título colonial fundado el 8 de marzo de 1700.

5 comentarios:

  1. que buena esa Silvio, me parece un excelente trabajo. ojala y tod@s pongamos en practica esta magnifica idea.

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  2. Primeramente, gracias por compartir las nuevas ideas. Soy de Guatemala Maya K'iche' de la región occidente y en la cual quiero felicitarles a ustedes, y nuevamente gracias por compartir.

    Saludos cordiales.

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  3. Gracias por enviar tan valiosa información, espero podamos mantener contacto, reciban un fraterno saludo desde San Cristóbal de las Casas, MChiapas, México
    CArlos Manzo

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  4. Admirable la creatividad de éste campesino de Jambaló al norte del Dpto. de Cauca en COLOMBIA. Vale la pena que todos los campesinos repliquen ésta obra hidráulica empesando por cultivar especies que conservan la humedad para qu sea aprovechada y se comviertaen un nacimiento de agua

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  5. Gracias primero por esta informacion de calidad. Estos inventos prueban que se puede crear lo practico y util con poca plata y sin tanto bla bla.

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